En el número de Diciembre (2008) de National Geographic aparece un artículo sobre las talas masivas de selva tropical en la isla de Borneo. Situada en Indonesia, es uno de los rincones del Planeta con mayor biodiversidad, donde además se descubrieron varias especies nuevas para la Ciencia hace pocos meses. La deforestación, de origen humano, se realiza para obtener aceite de palma.
La pregunta que nos podemos hacer ante noticias como esta es:
¿Qué pasará cuando todos los países en vías de desarrollo decidan cultivar sus tierras, y para ello talen toda la selva tropical?
Pues bien, las selvas tropicales, junto con la Taiga, constituyen los llamados "pulmones planetarios", es decir, limpian el aire del CO2 que nosotros producimos, retrasando los efectos del Cambio Climático. En definitiva, son esenciales para la salud de todo el Planeta.
Ahora bien: Estos paises tienen derecho a imitar nuestro actual modelo de desarrollo, a realizar estas talas y a cultivar sus tierras, nosotros no somos quienes para impedirlo. Entonces, ¿Este Planeta no tiene remedio posible? ¿Qué podemos hacer?
Pues bien, en nuestras manos está el ayudar, asesorar y contribuir con estos países para salvaguardar su biodiversidad, y también para asegurar la salud planetaria. Esto implica desarrollar fuertes Fondos monetarios internacionales, que colaboren con el desarrollo sostenible de estos países. Es decir, ya que los ricos nos hemos quedado sin bosques, ahora debemos pagar para que otros no talen los suyos, si queremos salvar el futuro de nuestros hijos.
Soluciones como el Ecoturismo pueden contribuir también con un desarrollo digno de estas poblaciones, pero no es suficiente. Esto supone aumentar las cuantías destinadas a Cooperación al desarrollo, mejorar su coordinación y efectividad, y otorgar al Medio Ambiente la importancia que de verdad tiene. ¿Seremos capaces de hacerlo?
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